Facebook

     SiteLock

Última hora
El turismo que no necesita Colombia - Miércoles, 01 Mayo 2024 04:44
Cuatro temas de actualidad - Miércoles, 01 Mayo 2024 04:44
Bifurcación - Miércoles, 01 Mayo 2024 04:44
Impuesto a Pensiones y Expropiación de Ahorro - Miércoles, 01 Mayo 2024 04:44

Adolfo Clavijo*       

En un artículo anterior expuse la falta de criterio que se hizo evidente en las actitudes y decisiones tomadas por el gobierno al expedir la reforma a la salud, al proponer y desarrollar la llamada “Paz Total”, al enunciar las medidas que tomará sobre el narcotráfico y sobre la explotación de petróleo y gas, entre otras disposiciones oficiales.    

En este nuevo artículo hago un análisis de lo que ha sido la falta de lógica en casi todas las determinaciones que ha venido tomando el gobierno en el cumplimiento de sus funciones normales. 

Muchos de los aspectos que en los órdenes estatales y gubernativos han fallado en materia de lógica han sido comunes en casi todos los gobiernos, pero en el actual se ubican en los nuevos proyectos que busca aplicar.

Es procedente iniciar este artículo conociendo la definición de la palabra lógica en el diccionario del RAE, que la puntualiza así: Ciencia que expone las leyes, modos y formas de las proposiciones en relación con su verdad o falsedad.

La inexplicable la carencia de lógica que se aprecia en los siguientes proyectos, reformas, aspectos, determinaciones, decisiones y declaraciones oficiales gubernamentales que viene adelantando el gobierno colombiano:

  1. En las propuestas consideradas en la Reforma de la Salud en cuanto se pretende acabar con las EPS, se busca darles un manejo indebido a los dineros en este campo y otras incongruencias de este proyecto.
  1. En los procesos de paz con el Eln, las disidencias de las Farc y todos los carteles de la droga, en donde se les da a esas organizaciones delincuenciales (criminales) el mismo nivel que en todo sentido tiene el Estado, como nación autónoma. Es decir, la forma como se está adelantando el proceso de paz es el mismo que llevarían a cabo dos o más Estados independientes que tienen el mismo estatus en todos sus órdenes como nación, como país o sea que se les está dando a esas organizaciones criminales una categoría estatal.

El hecho de emplear ese sistema, que ya se manejó con el M-19 y las Farc obliga al Estado colombiano a otorgar prebendas democráticas, políticas, judiciales, económicas y sociales que terminan reconociéndoles a quienes fueron delincuentes peligrosos, condiciones y calidades que sólo se merecen quienes se prepararon honesta y profesionalmente para desempeñar altos cargos oficiales.    

Igualmente, no tiene lógica que se nombren sujetos con penas judiciales pendientes por pagar para que cumplan misiones relacionadas con los procesos de paz. Se requiere una ley de sometimiento que no implique impunidad ni inmunidad para quienes hayan delinquido en organizaciones criminales.

  1. En el trato o manejo que se pretende darle al narcotráfico. Lo que se ha dicho al respecto va a terminar agrandando el problema porque busca convertirlo en un negocio legal. Para acabar definitivamente con este grave malestar de Colombia no existe un camino diferente al diseño y aplicación de una estrategia integral que emplee todos los potenciales y las capacidades del Estado, con el apoyo de otros Estados, para conformar un poder que lo pueda liquidar definitivamente.

 En el tratamiento que el gobierno pretende darle a la explotación del petróleo y del gas. Esa idea va a conducir a que Colombia pierda su mayor capacidad de ingresos económicos.

  1. En las actitudes y en las declaraciones de algunos ministros y funcionarios del gobierno que expresan conceptos ilógicos que no tienen justificación de ninguna naturaleza con los desarrollos que ellos mismos manejan.
  2. Las razones que explican estas faltas de lógica son:

De carácter gubernamental. Por cumplimiento de políticas presidenciales   y de las respectivas autoridades gubernativas.

Por improvisación. Porque no se adelantan los estudios y análisis completos y precisos que conducen a tomar decisiones verdaderamente acertadas.

Por terquedad. De las autoridades y los altos funcionarios que asumen disposiciones convencidos de que ellos están en lo cierto, en lo correcto. 

Por capricho. Cuando el jefe de una institución oficial impone su voluntad no porque sea la mejor solución sino para demostrar quién es el que manda.

Por ideología política. Cuando en el Congreso o en las organizaciones gubernativas se apoyan propuestas de determinados partidos o grupos políticos, aunque estas no tengan lógica ni sentido.

Nota. El próximo artículo tratará la Falta de Raciocinio en los desarrollos oficiales

Publicado en Columnistas Nacionales

Compartir

Opinión

Nuestras Redes