José Alvear Sanín
José Alvear Sanín
Como espontáneamente el pueblo colombiano, privado de verdadera orientación política, rechazó al petrismo 9 a 1 en las pasadas elecciones, se fortalece el romanticismo electoral. Una y otra vez oigo a muchos asegurar que, en 2026, la izquierda unificada que propone Petro será ampliamente derrotada y que el país regresará a un estado normal, constitucional, democrático, etc., etc.
José Alvear Sanín
Hace años se me quedó empezado El loro de Flaubert, agradable relato de Julian Barnes (1946), quien, con más de una docena de novelas, ocupa importante lugar en la nueva narrativa británica. Sin mayor interés en su producción ojeé su Inglaterra. Inglaterra (Barcelona: Anagrama, 1999), y cuando vi que allí aparecía la isla de Wight no pude resistir la tentación y me llevé el libro.
José Alvear Sanín
No quiero siquiera imaginar que la elección de la Dra. Camargo como fiscal tenga que ver con un revivido “cartel de la toga” en la Corte Suprema de Justicia. Tampoco quiero considerar la posibilidad de que ese nombramiento haya sido motivado por el razonable temor que infunde el autor de la terna, expurgada de una jurista independiente, y retocada, como todo el mundo recuerda.
José Alvear Sanín
Los colombianos nos estamos haciendo a la idea de que en las Cámaras es inevitable repartir mermelada, y que sin ella, el gobierno no puede sacar adelante sus proyectos de ley.
José Alvear Sanín
Quienes quieran creer, después de los resultados del “proceso de paz con las Farc”, que el actual con el Eln es una “negociación”, tienen que ser: 1. Tontos, o 2. Cómplices.
José Alvear Sanín
Cada día es más frecuente en las redes sociales la pregunta de quién gobierna a Colombia, porque cada vez es más notorio el desgobierno en todos los órdenes de la vida nacional.
José Alvear Sanín
La política colombiana vive de la consoladora ilusión de que en las elecciones de 2026 triunfarán las fuerzas democráticas, porque el país —que ya votó masivamente contra Petro en las territoriales de 2023—, castigará el peor gobierno de su historia.
José Alvear Sanín
Contrariando lo que predica cierta teología lunfarda de la liberación en el sentido de que el Infierno existe pero posiblemente esté vacío (¿hasta de demonios?), la Iglesia siempre ha creído, siguiendo el Evangelio, en los castigos eternos.